martes, 6 de noviembre de 2007

En Pintxo li va dir al Pantxu, "vols que et puntxe amb un puntxó?"

He vuelto a casa unos días para pasar el puente. Sé que siempre me quejo de lo mismo, pero después de un tiempo sin ir a veces es agradable comprobar que todo sigue en su sitio y que hay cosas que nunca cambiarán, como es el caso de la Televisión de Galicia, más conocida entre los telespectadores como TeleGaita. Nuestro canal autonómico parecía haber sufrido un lavado de cara que finalmente se quedó en un cambio de logo y la supresión del Súpermartes (programa desde el cual intentaba saltar a la fama Paula la de GH antes de GH). Ni siquiera han conseguido largar a SúperPiñeiro, reacomodándolo en otro lugar y otra hora de la parrilla.
Después de ver por enésima vez un capítulo de la Nanny Fine, mi sorpresa fue mayúscula al comprobar que los realitys también habían llegado a nuestro canal, y al parecer ya por su segunda edición para mi doble sorpresa. Y no un reality cualquiera, no. "A casa de 1907" recrea la vida en Galicia de hace un siglo a través de dos familias que tienen que hacer pruebas y sobrevivir haciéndose todo, de pañuelo en cabeza y boina calada. He de decir que muchas cosas me recordaban a la Galicia de 2007, pero el programa es corto y entretenido.
En el capítulo que pude ver celebraban las bodas de plata de uno de los matrimonios como una boda del siglo pasado. Todos los telespectadores pudimos comprobar como la hija (pienso que oligofrénica) de la familia de Dios (sí, de Dios) embargada por la emoción y las sorpresas rompía a llorar desconsoladamente sin dejarnos oir nada de lo que se cocía. El mejor momento fue el del "sí, quiero", ya que antiguamente las novias debían hacerse de rogar unas cuantas veces, y el cura-actor acabó desgañitándose con un "¡A ver, Puri, quieres o no quieres?!!". También llevaron a unos regueifeiros para hacer unas rimas improvisadas (súper improvisadas) para jolgorio de los invitados. Sólo recuerdo una rima sobre un seguro de la moto que no lo pagaba ninjén, que me recordaba a las rimas de Juanito del tipo "Unha vella en tempos de mouros fixo da cona unha praza de touros..." (Creo que no necesita traducción, pero estaré encantada de traducírselo a aquel que lo desee). Me encantó "A casa 1907", súper díver.
Por otro lado el sábado por la noche, que salí con las niñas y vivimos otro capítulo de enajenación mental transitoria y locura colectiva, descubrí casi por azar que el nacionalismo es una técnica de ligue bárbara. Resulta que la gente cuando se entera que vivo en Barcelona comienza a soltar improperios contra los catalanes y yo siento la imperiosa necesidad de defenderlos a capa y espada y argumento con ferocidad lo buena gente que son, reconociendo que maleducados hay en todas partes y siempre por delante que creo que el nacionalismo es en cierta manera un anacronismo. No me vale con que me salgan con que "mi primo fue una vez a Barcelona y le hablaron en catalán aunque él decía que no entendía", caso que debería encabezar las listas de leyendas urbanas, ya que las historias siempre son exactamente iguales, curioso. Mis amigas me azuzaban"mira la catalana" y yo como un torito venga a discutir, con unos, con otros. La imagen que se tiene de los catalanes fuera está totalmente distorsionada a voluntad de unos cuantos. Los catalanes no hablaban del estatut a todas horas ni de separarse de España a la hora de desayunar. Los catalanes caen mal porque les va de fábula, reconozcámoslo. E históricamente siempre les ha ido igual de bien, pura envidia cochina. La diferencia fundamental, bajo mi punto de vista, es que la mayor defensa del nacionalismo catalán han venido siempre de la burguesía, de la gente de dinero, de quien podía hacer y deshacer, y eso marca. Los gallegos, por muy nacionalistas que sean, no son vistos desde el centro como peligros potenciales, por mucho que les gustara. Y a mí también, que coño, porque significaría que también nos va de fábula y por una vez no nos dejamos pisotear. Y los vascos, pues un tema aparte, claro.
Pues eso, que discutiendo en casa porque la madre de mis hermanos quiere firmar no se qué manifiesto para que no eduquen a su hija totalmente en gallego y no sé que historias me contaba del Valedor do Pobo. A mí me parece bien, me parece el camino necesario para llegar a algo, sobre todo en la situación actual de Galicia (comparando siempre con el caso catalán). Puede que a mí en mi día a día no me sirva para nada saber gallego, pero es mi identidad, mi diferencia, mi yo. Y sólo por eso voy a defender la enseñanza en gallego y otras actuaciones semejantes.
En fin, que no me creo que yo haya escrito una entrada como ésta teniendo en cuenta las primeras entradas de mi blog, y que lo que yo quería decir y se me ha ido el santo al cielo, es que he descubierto que hablando de nacionalismo se liga una barbaridad. Aunque puede que sea para que me calle, pero es ciertamente efectivo.

5 comentarios:

Ra está en la aldea dijo...

Para mí, la verdadera y fundamental característica que diferencia a los catalanes del resto de este conglomerado histórico-social-estatal que se llama España es su furor asociativo. Se asocian por todo. Todo el mundo es miembro de unos coros y danzas, de un club de excurionistas, del grupo de recolectores de bolets, de una asociación de vecinos de la calle verdi de abajo (literal)... Y claro, como con eso se consigue que "el poder" vaya de abajo a arriba y no al revés y estar presente en las tomas de decisiones importantes y que se cuente contigo para llevar a cabo cualquier cosa, pues así les va. Y es que a veces las cosas más pequeñitas son las que más influencia tienen.

Anónimo dijo...

Después de leer el post te aseguro que conmigo no ligas, vaya rollo.
Pero mejor que estes ligando que dando bolsazos por la calle.

Cosmonata dijo...

Sí, lo que en el resto de España es ya considerado quasi antropología cultural, en Catalunya es realidad.

C. dijo...

Creo que es efectivamente cierto lo que afirma nuestra querida Ra. Una vez entré al edificio de la Asociación de Historiadores de la Ciudad de Mataró, y descubrí que en la puerta del frente había una Asociación de Colombofilia. Y mi fértil imaginación me hizo dar carcajadas cuando veía en mi cabeza a todos estos colombofílicos reuniéndose los días miércoles (que no se porqué es el día que asocio con las palomas), redactando estatutos de la asociación como por ejemplo desde qué ventana es más conveniente echar a volar una paloma, y etc.
En todo caso, los nacionalismos casi siempre han surgido de las burguesías y no olvidemos que el concepto de nación es relativamente nuevo y comenzó casi a la par con las revoluciones burguesas, si no me equivoco.... en fin.

Maria Del dijo...

La primera vez que fui a Galicia me invitaron a una cena del BNG, imagina lo que pintaría yo allí, acabé tomándome las copas con el cabecilla que hacia los discursos diciéndole "porque no puedo, que si no te votaba"
Fui con mi madre a Cataluña el año pasado, la mujer lo mas que había salido de la Zona Sur había sido un fin de semana a Inglaterra (que bonito es todo, decía ella) o Ceuta que no es precisamente el norte.
Acabó diciéndole a un taxista que no nos quería cobrar la vuelta por que hizo la mili en Granada y le daba añoranza escucharnos fue los siguiente:
"Me he llevado muy buena impresión, que gente mas apañá, al próximo que me diga de los catalanes que si hablan en catalán todo el rato y que si son unos agarraos, les mandaré por aquí un fin de semana, que ignorantes, hay que ver mundo para poder hablar"
Problema, explicarle lo mismo a mi padre que miles de amigos le han dicho que un amigo estuvo allí y ....